miércoles, 10 de febrero de 2016

"DIEZYDIEZ"¨

Juegan al escondite; lograr esconderse y evadirse de todo esperando que alguien te encuentre y te haga sentir que el mundo real tampoco está tan mal suena atractivo e incluso divertido.

Aunque, esconderse de otro puede ser posible, esconderse de uno mismo no lo es.

A los niños les encanta; en casa juegan mucho.
Cuentan con ilusión e inquietud: uno, dos, diez, catorce, diecinueve y "diezydiez". 
Me encanta.

Son los niños quienes tienen la mayor facilidad para poner nombre coherente y, desde mi punto de vista,  aciertan con maestría. Porque "diezydiez" no estará recogido en la RAE pero define claramente a 20, "sabo" tampoco estará recogido pero es de saber, y de saber mucho.


Los pequeños sabios no se pierden en palabras grandilocuentes y conceptos que confundan al personal; son sencillos, directos y coherentes. Y esa misma estrategia es la que les permite disponer de la mayor parte del tiempo para vivir el ahora.
Saben que el aquí y el ahora es lo más importante y, lo que es mejor, actúan en consecuencia. 

¡Cuánto hemos de aprender!

No hay comentarios:

Publicar un comentario